El viaje en busca de las arenas rojas del desierto del Sahara empieza en Marrakech. Un viaje de tres días bajando desde el Alto Atlas y cruzando el Valle del Dadés rumbo a la frontera con Argelia. Una travesía de caminos serpenteantes salpicada de oasis, palmerales, rosedales, palacios de adobe o "kasbas" (antiguas ciudades fortificadas), escenarios naturales de la Guerra de las Galaxias o Gladiador. Un largo camino al desierto cargado de hospitalidad marroquí e iluminado por cielos infinitamente estrellados.